La Academia Barilla, una de las escuelas de cocina más prestigiosas de Italia, publicó hace un tiempo una lista con los errores más comunes que los extranjeros cometen al preparar y comer la comida italiana en sus respectivos países.
En el listado de dicha institución, que tiene entre sus objetivos «defender y salvaguardar los productos alimentarios italianos con denominación de origen», no deja lugar a dudas: o lo que se sirve es comida italiana, o no lo es. ¡Así de simple!
¿Cómo se arruina la comida italiana?
A continuación los diez errores más frecuentes que, según los especializados en la materia, en este caso la Academia Barilla, no se deben cometer jamás con la comida italiana. Identifícalos y no los uses, sólo así podrás comer correctamente como en Italia:
1Nunca se toma cappuccino luego de las comidas
El café y el cappuccino son parte del orgullo de Italia en el mundo, pero hay que tener en cuenta que el primero se toma luego de las comidas y el cappuccino durante el desayuno, acompañado de un cornetto o un brioche. Evidentemente si quieres puedes tomarte un cappuccino luego del almuerzo o la cena, pero debes tener en cuenta que la reacción de un italiano sería la misma que si vieras a alguien tomarse un buen vaso de leche chocolatada luego del ceviche.
2El risotto y la pasta no son acompañamientos
La cocina italiana prevé que tanto el risotto como la pasta sean servidos como platos únicos (con excepción del Ossobuco alla Milanese). Servir en el mismo plato la pasta junto con otra comida es un error que en Italia se considera un sacrilegio. En el caso de los spaghetti, como en las pastas en general, se sirven siempre como primer plato y no se cortan con cuchillo.
3No se maltrata a la pasta durante su preparación
¿Echar aceite al agua de la pasta mientras se cocina? Nunca. ¿Agregar calditos de pollo, ajos, perejil u otros en plena preparación? Jamás. ¿Cocinar la pasta media hora hasta que esté muy blanca y se pueda pegar en las paredes de la cocina? ¡Nunca jamás! Para cocinar bien la pasta, basta echar agua en una olla y cuando esté en ebullición agregar un poco de sal. Luego de que la sal se haya disuelto por completo, se agrega la pasta y se la deja cocer máximo 10 minutos, así el resultado de nuestra preparación será una pasta al dente.
4¿Ketchup en la pasta? ¡No, por favor!
Esta combinación es letal según la Academia Barilla. De hecho el sólo imaginarlo ya es letal para el buen gusto. Simplemente, no se debe hacer. La cocina italiana tiene infinidad de salsas para agregar a la pasta, todas de exquisito sabor y de antigua tradición. ¿Merecen ser mandadas a un rincón para privilegiar un chisguete de Ketchup? ¡Evidentemente, no!
5Los spaguetti a la boloñesa no se sirven en Italia
Quizá uno de los platos más famosos de la cocina italiana, el más exportado, pero resulta que en Bologna, no hay un solo restaurante que lo cocine. Esto porque la receta original prevé que con la salsa boloñesa se preparen los tagliatelle, una pasta más gruesa que los spaghetti. De hecho uno puede decir, pasta es pasta, que sea más gruesa o más delgada da lo mismo; sin embargo, para un italiano la diferencia está al mismo nivel de la que un peruano puede encontrar entre un ceviche de pescado y un ceviche de pollo, es decir, no es lo mismo.
6¿Pasta con pollo? ¡Nunca en Italia!
Ya que hablamos del pollo debemos señalar que en Italia no existe el spaghetti con su pierna de pollo encima. Sin embargo, a pesar de la presencia del pollo, parece ser que quienes idearon este tipo de plato fueron los estadounidenses. Los peruanos, por su parte, le agregaron la papa a la huancaína. Tres platos en uno.
7¿Ensalada César? ¡No existe en Italia!
Para la Academia Barilla, la famosa ensalada César toma su nombre de Caesar Cardini y pertenece a una larga lista de platos creados por chefs de origen italiano, pero que en Italia son totalmente desconocidos, sea el plato que el autor.
8El mantel blanquirrojo tampoco existe en Italia
Los spots publicitarios nos muestran siempre a la nonna que extiende un mantel blanquirojo sobre la mesa para llamar a almorzar a toda la familia. Incluso hay marcas que tienen este mantel en sus logos para garantizarnos la procedencia italiana de sus productos. Sin embargo, este mantel no se usa nunca en Italia. Tampoco se le encuentra en los restaurantes italianos, salvo aquellos que son exclusivamente para turistas.
9Los Fettuccine a lo Alfredo no son famosos en Italia
Sin duda, es uno de los platos más requeridos, pero en Italia son prácticamente desconocidos. Esta pasta condimentada con mantequilla y Parmigiano Reggiano fue inventada en Italia por Alfredo Di Lelio, propietario de un restaurante en Roma, pero no se difundió en todo el territorio italiano ni mucho menos llegó a ser un plato tradicional. Sin embargo, fuera de Italia son increíblemente populares, al punto de llegar a ser parte indispensable de la Dolce Vita.
10Cocina tradicional italiana que se respeta
Es un hecho que hoy en día se tiende a fusionar todo. El deseo de llegar a nuevos sabores y de ser famosos con nuevos platos puede más que el simple hecho de dominar las clásicas recetas. Pero, aquí hay que tener en cuenta que tanto la comida italiana como la peruana tienen en común sus orígenes en humildes familias. Así tenemos que la madre italiana, al igual que la peruana, se las ingeniaba para dar de comer a su familia. Y todo ese conocimiento lo trasladó a sus hijas, quienes a su vez se lo legaron a sus respectivas hijas. En suma, no hay nada mejor que respetar la receta original de la nonna y compartirla con quienes más quieres, porque la comida italiana es eso, amor a la familia.